Roger Ebert es un famoso crítico de cine norteamericano. Este crítico tiene una larga carrera en el mundo del cine, desde 1967 no ha parado de trabajar hasta que hace unos años le diagnosticaron un cáncer tiroideo.
El cáncer se le llevo por completo la posibilidad de hablar, lo que lejos de dejarle secuelas para no seguir con su vida normal, le animaron a seguir. Sigue escribiendo sus críticas en su blog y para el Sun Times.
Desde que le operaron en el año 2002 no se ha podido comunicar con su familia más que escribiendo, con señas o, maravillas de la tecnología, con el sintetizador de voz “Alex”, incluido de serie en todos los Mac OS X (puedes abrir un documento de texto, escribir algo y darle a Edición » Habla » Iniciar locución para probarlo). Este sintetizador, bastante bueno por cierto, solo funciona en inglés y le permitía “hablar” con una voz que no era suya. En 2006 publicó un artículo en el New York Times contando su experiencia con “Alex”.
Aquí es cuando llega lo increíble y lo verdaderamente inspirador. Ebert navegando por internet se encontró con una empresa irlandesa llamada CereProc, especializados en la transcripción de texto a voz. Ebert pensó que si podían crear un sistema capaz de transformar lo que el escribe en un documento de texto y transformarlo en una fea voz de alguien desconocido, quizá podrían hacerlo con su propia voz. Recuerda que desde (más o menos) 2002 que se le diagnosticó este cáncer, no podía hablar más que con la voz por defecto en Mac OS X.
CereProc aceptó el reto y en pocos meses han presentado el resultado, un sintetizador que usa la voz de Roger Ebert para que el propio Ebert pueda hablar con quien quiera. Pero ¿cómo lo hicieron? Bien, al ser una persona que ha trabajado en este negocio del cine, apareció bastantes veces en DVD y programas de TV, por lo que su voz estaba grabada, catalogada y almacenada en DVD y en archivos de las productoras de películas. El mismo Ebert describe como lo hicieron en su blog:
CereProc esta mezclando mis fragmenos de audio de “Casablanca”, donde sueno entusiasta, y “Folating Weeds”, donde sueno calmado y respetuoso…
Esta semana han aparecido en el famoso programa de Oprah él y su mujer, para comprobar de primera mano como era la reacción de su mujer, “oírle hablar otra de nuevo”, aunque sea por un ordenador. Este es el emotivo momento:
Puedes llorar, tranquilo. Es increíble, es inspirador el uso de la tecnología en algunas ocasiones. Si bien la tecnología nos ha traído grandes alegrías, también grandes desgracias, pero tras ver este vídeo, ¿te imaginas las posibilidades? Uno nunca sabe lo que el futuro le depara, nunca sabrás si en N años sufrirás un cáncer que te deje ciego, mudo o con cualquier otro problema físico. Pero en este caso, imagina el poder grabar tu voz de antemano, guardarla en algún lugar seguro y que en un futuro (espero que jamás), puedas usar esa grabación para devolverte tu voz.
Ebert lo hace ahora con un ordenador, pero se podría crear aparatos más pequeños que sinteticen el texto en una voz que sea la del legítimo dueño.
Es por cosas como estas por las que amo hablar de tecnología, porque detrás de productos aparentemente comercial, hay investigación y usos que no sabíamos.
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