Porque la realidad es tridimensional, y un papel no puede contener esa dimensión extra que se escapa, profundidad y relieve son siempre apariencia. Hacía falta que alguien como Dániel Rátai y Zoltan Karpati unieran un ratón muy especial a una pantalla 3D y unas gafas ad-hoc para permitirnos no solo ver sino también crear objetos con volúmen. ¿Deseas saber más?
El sistema, denominado Leonar3Do en homenaje al genio renacentista natural de Vinci (Italia) se anuncia como capaz de ser manejado por un niño de 8 años, tal es su sencillez. Básicamente es una mezcla entre ratón y aerógrafo que permite al dibujante dibujar, literalmente, en el aire. Líneas que ganan en profundidad y relieve y que pueden ser giradas en todas direcciones para completar su estructura.
Las aplicaciones son infinitas en el mundo del entretenimiento, el arte y el diseño. El software de Leonar3Do soporta los ficheros de formato .obj, .stl y .3ds con lo que la célebre tableta de diseño de los aficionados al CAD y el síndrome del tunel carpiano pueden dejar paso a un espacio diáfano de total libertad espacial y tridimensional y a un problema de hombros cargados.
Pero oye, mola trabajar pareciéndose a Tom Cruise en “Minority Report“.
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