Las arañas representan uno de los artrópodos más ágiles de su especie y algunas pueden incluso saltar, gracias a sus ocho miembros de accionamiento hidráulico. A modo de copia de la naturaleza, los investigadores han diseñado un robot móvil inspirado en el mismo principio que mueve las patas de la misma. En su creación han empleado un proceso de impresión en 3D –acumulación de capas hasta rellenar la figura por completo–. El resultado es un robot ligero que puede explorar el terreno que supera el alcance del ser humano.
Gracias a una envidiable agilidad a la hora de moverse, la «araña robot móvil» se abre paso a través de terrenos complicados resultados de desastres naturales o accidentes químicos o nucleares, como el de Japón. Depresiones, baches y otros obstáculos no son rival para las ocho patas dotadas de las más alta tecnología oficial.
Este arácnido tecnológico va perfectamente equipado para asumir cualquier misión: una cámara y equipos de medición a bordo, que proporcionarán los servicios de emergencia una imagen de la situación sobre el terreno, junto con los datos recopilados sobre las sustancias venenosas. Llevar a cabo sus objetivos no resulta una tarea fácil, después de todo, se debe evitar que vuelque, como explica Ralf Becker, responsable del inveto e ingeniero del Instituto Fraunhofer de Ingeniería de Manufactura y Automatización (IPA) de Alemania.
Sin embargo, este riesgo parece de menor importancia, ya que sus creadores se han encargado de que esto no ocurra. Como una araña real, mantiene cuatro patas en el suelo en todo momento, mientras que las otras, a su vez, se preparan para el siguiente paso. Incluso en su apariencia, esta criatura guarda una importante semejanza con una articulación artificial de un octópodo.
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