Investigadores de la Universidad Nacional de Educación a Distancia y el CSIC han demostrado la utilidad de algunos materiales de carbono en la deshidrogenación del bioetanol, un tipo de biocombustible. En concreto, han comprobado que el grafeno y el grafito proporcionan mejores resultados que el sílice convencional.
El agotamiento de las reservas de petróleo ha provocado la necesidad de encontrar otras fuentes para obtener los compuestos químicos necesarios para la industria. En ese sentido, la biomasa es una fuente renovable que se podría utilizar con ese propósito. El bioetanol, obtenido de la fermentación de los cultivos de cereales y azúcares, es uno de los principales productos provenientes de esta biomasa.