Un niño de entre tres y nueve años con atrofia muscular espinal (AME) llevará un exoesqueleto durante un año que le ayudará a mantenerse en pie y a caminar de forma independiente. El proyecto ya se presentó en junio de este año, pero ahora, el primer exoesqueleto infantil del mundo está listo para usarse y entrar en la fase de ensayo clínico.
El dispositivo pesa 12 kilos y está fabricado con aluminio y titanio. CSIC |