Hoy en día las impresoras 3D son capaces de crear objetos sorprendentes, desde una prótesis para la cara de una persona hasta piezas de un arma. Pero en muchos casos estos prodigios sólo están al alcance de grandes empresas y laboratorios. Puede que necesiten grandes impresoras de elevada resolución o polímeros biocompatibles especiales. Para la gran mayoría de los usuarios domésticos y pequeñas empresas imprimir en 3D es sinónimo de imprimir en plástico epoxy, una sustancia resistente pero lejos de proporcionar un buen acabado a los objetos resultantes.
La situación podría cambiar en breve. varias empresas están investigando otros materiales compatibles con los fusores encargados de derretir y depositar el material con el que se crean los objetos impresos. Una de las más prometedoras es un estudio de arquitectura y diseño de Oakland, en Portland, llamado Emerging Objects.
En su estudio han sido capaces de crear varios materiales sostenibles y biodegradables que ofrecen acabados y texturas únicos. Sal, cemento, nylon o pulpa de madera y papel son algunas de las posibilidades. Los resultados, a la venta en su propia página, son sorprendentes y muchos de ellos pueden ser tratados con posterioridad con una pequeña capa de barniz o fijadores específicos que garanticen la durabilidad de la pieza.
Por ahora Emerging Objects sólo vende objetos ya construidos pero ha creado una empresa que a finales de año comenzará a vender los materiales compatibles con impresoras 3D, empezando por el cemento. [Emerging Objects]
Fuente:
No hay comentarios:
Publicar un comentario