Pues vamos a tener que cambiar el refrán de “la música amansa a las fieras” por algo así como “el Wi-Fi es mejor que un Valium para los jovenes” o “la tecnología consigue lo que intento la regla de madera”.
Eso al menos se desprende del pequeño experimento que han hecho en un colegio de Arizona que decidió, poner WiFi en uno de los autobuses que lleva diariamente a los colegiales desde el centro escolar hasta sus casas.
Sólo hay que leer lo que dice el conductor:
"La diferencia ha sido abismal, los niños no se pegan unos a otros, las niñas están ocupadas y no hay tantos saltos"
Vamos que ha tenido un éxito increible, tanto para la tranquilidad del autobús, como para los niños, que aprovechan para adelantar tareas, escribir emails a los amigos, o simplemente para actualizar sus redes sociales.
Los estudiantes ya lo llaman “el autobús de internet“ y todos quieren que el suyo tenga conexión para poder usar sus portátiles durante el trayecto.
Sorprende ver cómo sólo hay que saber dar en la tecla, ponerse en el lugar y saber las necesidades y prioridades de los jóvenes para controlarlos, no hay más. Todo por 200 dólares del router y 60 dólares mensuales de la conexión.
Sin duda, una iniciativa a seguir. A ver si en España toman ejemplo.
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