Hoy en día en muchos países las clásicas cabinas telefónicas están bastante olvidadas. Casi todo el mundo dispone de su teléfono móvil y, a excepción de población inmigrante que las utiliza para llamar a mejor precio a sus países de origen, el uso que reciben es mínimo. En Austria son conscientes de esto, pero lejos de eliminarlas del paisaje han decidido transformarlas en estaciones de carga para coches eléctricos.
Telekom Austria va a reutilizar 30 cabinas de las que tiene repartidas por el país para que cualquiera de los 223 coches eléctricos ya tienen matrículados se puedan recargar por un precio aparentemente muy económico. Habrá un periodo de prueba gratuito y después se podrá pagar cada carga a 1€ a través de tarjetas RFID o del teléfono móvil, para más regodeo sobre las pobres cabinas.
Además, podrá cargar también bicicletas y ciclomotores eléctricos. Los coches tardarán unas 6 horas y media y estos últimos necesitarán unos 20 y 80 minutos de carga respectivamente.
Sin duda, una muy buena iniciativa que impulsa el paso a los vehículos eléctricos y que esperemos se extienda por otros países. Por cierto, ¿será una coincidencia que en la imagen salga una chica en ropa interior o será totalmente deliberado para que la cabina-cargador nos guste más?
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