Craig Venter ha vuelto a jugar a ser Dios. El científico que presentó hace ya 10 años el genoma humano en la Casa Blanca ante Bill Clinton ha dado un paso más hacia la creación de vida. Tras más de 15 años de trabajo, él y su equipo han logrado fabricar en el laboratorio el ADN completo de la bacteria 'Mycoplasma mycoides' e introducirlo en otra célula recipiente de otra especie llamada 'Mycoplasma capricolum'.
Contada de forma resumida, esta investigación publicada en la revista 'Science' puede parecer un acontecimiento científico más. Pero lo cierto es que se trata de la primera vez que un investigador crea, con todas las implicaciones que esta palabra tiene, una forma de vida sintética, cuyo material genético procede de cuatro botes de productos químicos.
Para lograrlo, los investigadores fabricaron en una máquina de su laboratorio todas y cada una de las unidades básicas del ADN de la bacteria 'Mycoplasma mycoides' y los ensamblaron como si de un Mecano se tratase. Una vez montado el complicado puzzle, vaciaron una célula de otra especie de bacteria e introdujeron el código genético sintético en la célula recipiente.
Un salto en el árbol de la vida
En poco tiempo, el nuevo 'software genético' se adueñó de la bacteria y dentro de ella no quedó ni un sólo rasgo de la antigua especie. A partir de ese momento, sólo expresaba las proteínas de la bacteria sintetizada y sus características eran las que confería el código genético fabricado en el laboratorio. En pocos segundos se había transformado en una especie diferente.
Las implicaciones científicas, éticas y filosóficas que tiene esta nueva investigación son infinitas. ¿Hemos definido bien la palabra Vida? Si pudiéramos mejorar el código genético humano, ¿Deberíamos hacerlo?
En el terreno de la Ciencia, las novedades son mucho más sencillas de asimilar. Las mismas técnicas de laboratorio pueden ser utilizadas para fabricar en el futuro combustibles limpios, productos químicos o sustancias alimenticias o para limpiar agua o acelerar el proceso de fabricación de antibióticos.
Lucha contra el cambio climático
"Esta es una potentísma herramienta para decidir qué queremos hacer en el campo de la Biología", aseguró Venter a través de una conversación por Skype ofrecida por la revista científica 'Science'. "Estamos desarrollando en estos momentos la utilización de algas capaces de capturar CO2 y de transformarlo en hidrocarburos que pueden ser procesados en las refinerías ya existentes. Eso evitaría tener que sacar más petróleo del suelo".
Desde hace años, Venter trabaja con al idea de diseñar organismos que puedan ayudar a combatir el cambio climático. "No hay ningún alga natural que conozcamos que pueda hacer esto en la escala que nosotros necesitamos, así que tendremos que usar las nuevas tecnicas de genómica sintética para desarrollar nuevas algas a partir de las que ya existen o desarrollar otras nuevas que tengan las propiedades que queremos que tengan", explicó Venter.
"Creo que lo más importante es que estamos entrando en una nueva era científica limitada sólo por nuestras imaginaciones", sentenció el investigador.
1 comentario:
La Naturaleza no falla nunca, porque tiene millones de año de experiencia, pero nosotros, el hombre apenas llevamos sesenta años experimentando? Podemos hacer un desastre, como siempre. Mejor dejar de sintetizar adns que si bien en este caso es análogo, sabemos que algún factor siempre se puede escapar.Una célula se puede controlar, pero la ecologia es un sistema complejo.
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