Los investigadores de la NASA andan estos días fascinados por un sorprendente fenómeno que ha sido bautizado como 'tsunami solar' y que ha sido captado por las naves espaciales gemelas STEREO.
Se trata de una imponente ola de plasma caliente que recorre la superficie del Sol. Hace años, cuando los científicos contemplaron el fenómeno por primera vez, dudaron de que se tratara de una ola real y muchos pensaron que en realidad se trataba de algún tipo de sombra.
Sin embargo, los investigadores están seguros de que era real: "Ahora sabemos que los 'tsunamis solares' son reales", asegura Joe Gurman, del Laboratorio de Física Solar del Goddard Space Flight Center.
El pasado mes de febrero las naves gemelas STEREO confirmaron la existencia de este particular fenómeno de la naturaleza: la mancha solar 11012 hizo explosión de manera inesperada. La explosión lanzó al espacio una nube de mil millones de toneladas de gas (un 'CME') y envió un 'tsunami' a la superficie del Sol. STEREO grabó la ola desde dos posiciones distintas, con una separación de 90º, ofreciendo a los científicos una vista sin precedentes del fenómeno.
"Definitivamente, fue una ola", afirma Spiros Patsourakos, investigador de la Universidad George Mason y principal autor del estudio que el 'Astrophysical Journal Letters': "No es una ola de agua si no una ola gigante de plasma caliente y magnetismo".
No son una amenaza para la Tierra
Su nombre técnico es 'ola magnetohidrodinámica de modo rápido', o 'ola MHD'. La nave STEREO la vio elevarse a 100.000 kilómetros de altitud y desplazarse a una velocidad de 250 kilómetros por segundo.
Los tsunamis solares fueron descubiertos en 1997 por el Observatorio Solar y Heliosférico (SOHO). En mayo de ese año, un CME llegó desde una región activa y el SOHO registró un tsunami que produjo olas lejos del lugar de la explosión. En aquella ocasión los investigadores se preguntaron si se trataba de una ola o sólo de una sombra.
Las dudas permanecieron hasta el lanzamiento de STEREO, en 2006. En el momento de la explosión, STEREO-B estaba situada encima del lugar de la explosión mientras que STEREO-A estaba posicionada en ángulo recto, "una geometría perfecta para descifrar el misterio", según el co-autor del estudio Angelos Vourdilas.
Los tsunamis solares no representan una amenaza directa para la Tierra. Sin embargo, de su estudio se pueden extraer importantes conclusiones. "Podemos utilizar la información para diagnosticar las condiciones en el Sol. Las olas de 'tsunami' también pueden mejorar las predicciones meteorológicas del clima en el espacio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario