9 mar 2010

¿Un gorila en Marte?


¿Recuerdan la imagen de los árboles de Marte? ¿Y la del Big foot que se paseaba por el Planeta rojo? ¿Quizás la de la cara tallada sobre la arena? Por si no fuera suficiente, una nueva fotografía se suma ahora a esa colección de rarezas marcianas para demostrar que las apariencias engañan. Se trata de una ilusión óptica en la que un gorila aparece sorpresivamente en el paisaje del planeta. En realidad, se trata una imagen tomada por la sonda Opportunity en 2004 y que ha sido exageradamente ampliada. Sin embargo, el diario británico The Sun, quizás en un día pobre de noticias, ha tratado ampliamente el tema, incluso con infografías donde estudian el tamaño y las proporciones del mono.

La imagen real de la roca puede verse en una de las páginas web de la NASA, y, por supuesto, no tiene nada que ver con un gorila. Las ilusiones ópticas en Marte son recurrentes. Una de las más bonitas es el bosque de árboles que creemos ver en una impactante fotografía tomada por HiRISE (High Resolution Imaging Science Experiment), una potente cámara de alta resolución a bordo de la misión MRO, actualmente en órbita de Marte. La foto muestra con gran detalle una zona de dunas arenosas cerca del polo norte del planeta rojo. Y sobre ellas, lo que a primera vista parecen ser hileras de árboles que, en realidad, son estructuras planas formadas por arenas basálticas que afloran a la superficie de las dunas y que se subliman en vapor debido a la acción de los rayos del Sol.

Sin embargo, la foto más famosa sigue siendo la «cara de Marte», un impactante documento gráfico enviado a la Tierra en 1976 por la sonda Viking 1 en el que se aprecia, perfectamente tallado, un rostro humano de más de un km. y medio desde el «pelo» a la punta de la «barbilla». La imagen ha dado lugar durante décadas a todo tipo de teorías y especulaciones sobre antiguas «civilizaciones marcianas». De 2007 es el caso de la supuesta estatuilla, de apenas unos centímetros de alto, representando a una mujer sentada y en actitud pensativa. La fotografía fue tomada por las cámaras del vehículo Spirit. Por supuesto, tampoco en esta ocasión las cosas eran lo que parecían ser. Se trataba, esta vez, de una simple piedra.




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